sábado, 26 de octubre de 2019

Las elecciones de mañana y la Salud en el Uruguay


Mañana entre muchas otras cosas se juega el futuro de la salud en el Uruguay.

Durante estos 15 años el FA ha mostrado una incapacidad total para resolver el tema de la atención de la salud para muchos uruguayos.

De la misma manera que no han podido con la educación o con la seguridad o con otras tantas cosas, no han podido o no han querido hincarle el diente al mercado de la salud porque entre otras cosas hay demasiados intereses económicos fuertemente vinculados con el poder de esta fuerza política.

Han casi monopolizado especialidades, han protegido endeudamientos de algunas instituciones en dimensiones impensables, han permitido todo tipo de conflictos de intereses a lo largo y ancho de todo el país, mientras localidades quedan sin cobertura alguna.

Han ignorado a 165000 niños y adolescentes que viven en asentamientos con todos los riesgos sanitarios imaginables y ahora salen a comprometerse sin recursos a resolverlo.

El Uruguay malgasta en salud casi el doble de lo que gasta en educación y hoy tenemos localidades como Punta del Diablo que no tiene cobertura para sus casi 2000 habitantes permanentes y para algún turista que se le ocurra internarse en ese abandono asistencial.

Sin embargo dicen haber logrado el mayor avance en políticas sociales con la reforma de la salud, que de reforma no tuvo prácticamente nada.

Estos últimos tiempos hemos estado trabajando sobre las propuestas de los diferentes partidos de la oposición, para mejorar los resultados del Sistema de Salud del Uruguay y el gasto desproporcionado en función de esos resultados y hemos encontrado muchas más coincidencias que discrepancias.

Por eso es tan importante lo que hagan mañana.

Voten lo que se les ocurra pero no sigan manteniendo incapaces en el poder que mienten sin escrúpulos.

jueves, 3 de octubre de 2019

La Reforma de la Salud, el mayor logro de estos 15 años, poblados de fracasos

Mi columna en La Democracia Digital

La mentira, herramienta tradicional de la izquierda uruguaya, ha estado y sigue estando en la base de la FALSA REFORMA DE LA SALUD

La salud no figura como prioridad en la preocupación de los uruguayos. Los voceros del oficialismo sostienen que es porque la reforma de la salud mejoró de tal manera la cobertura asistencial que dejó de ser un tema preocupante. Desde que tengo memoria nunca lo fue, porque entre otras cosas no existía impedimento alguno para que quien lo necesitara fuera asistido.

Días pasados concurrimos a una convocatoria organizada en el Instituto de Higiene de la Facultada de Medicina de la UDELAR, en la que los partidos políticos debían presentar sus prioridades en el tema de la salud.

Lamentablemente tenemos visiones bastante diferentes sobre las prioridades que debe tener quien se haga responsable del MSP. Por lo menos para mí ha quedado en evidencia la distancia que a veces hay entre la academia y la experiencia que genera baquía.
Nada de lo dicho deja de ser importante, la gran discrepancia es el lugar de la carreta, adelante o detrás de los bueyes.  

Escuchar la ponencia del Dr. Miguel Fernández Galeano como asesor del Ing. Martinez, no hizo más que confirmar lo que vengo sosteniendo hace ya bastante tiempo y que de alguna manera se confirmó cuando la supuesta reforma cumplió 10 años de su aprobación parlamentaria, el FA va a utilizar dicha falsedad como uno de sus mayores logros.

Y si eso es así, como me lo imagino, quienes tenemos el privilegio de haber alcanzado los 73 años y haber transitado la vida profesional por los más variados puestos de trabajo y algunos de dirección, nos convertimos en una suerte de memoria viviente que no puede dejar de asombrarse cuando descubre que estos personajes mienten, basados en la ignorancia de la gente de lo sucedido hace tanto tiempo.

La afirmación que me hizo perder la paciencia con la que me había cubierto después de recordar, a la entrada, que en ese estacionamiento me secuestraron los tupamaros cuando salía de clase, para experimentar el vehículo que yo tenía, que recién había salido al mercado, fue algo que le había dicho a Martín Lema en un debate televisivo, reforzada sobre la base de que Martín era demasiado joven para saber de eso. Miguel volvió a sostener, con total desparpajo, que hasta que llegó el FA al gobierno los hospitales era hospitales pobres para pobres.

Cuando tuve oportunidad de preguntar le consulté si él tenía alguna idea de cómo la FEMI, que atiende a la clase media, media alta y alta de la sociedad del Interior del país, había prestado la asistencia de aquellos afiliados que debían internarse y que debía saber que lo había hecho durante mucho tiempo en los únicos centros con capacidad de internación que existían en todo el país.

Me respondió con la manida frase del aumento de los recursos asignados a ASSE, pero nada dijo de mi afirmación. Obviamente nada tenía para decir ante una memoria viviente que estaba presente

Aparte de esa falsedad, dicen haber impulsado una profunda reforma de la salud y que gracias a ellos hoy el país cuenta con un Sistema Nacional Integrado de Salud.

La primer pregunta que surge es qué era lo que ha existido en el país, prácticamente desde la época de la Colonia. Si nos ajustamos a lo que significa el concepto de sistema, que implica un conjunto de estructuras, con una misma finalidad y en un mismo espacio, desde el principio mismo de nuestra historia hubo salud para los soldados, salud para los indigentes y salud privada. 3 estructuras diferentes a las que más tarde, en el siglo XIX, se suma el mutualismo con la creación de la Asociación Española y otras mutualistas.  Por lo tanto lo de haber creado un Sistema  es absolutamente falso.

Le agregaron lo de Nacional, como si hasta la llegada de estos reformadores en el país no había asistencia. Basta recorrer el país, cosa que seguramente no han hecho los opinólogos, para comprobar la vejez de algunos hospitales y Centros Auxiliares a  lo largo y ancho del territorio. En virtud de estas evidencias, lo de nacional ya lo era desde principios del siglo pasado, bastante  antes de la llegada del Frente Amplio al gobierno o de lo contrario como Director de ASSE anduve visitando servicios que no existían.

Lo único innovador fue el agregado de Integrado que, pese a que mencionan algunas centenas de acuerdos muy parciales y de muy escaso impacto para lo que habría que hacer, cambios profundo en la integración no han logrado ninguno. Para prueba basta comprobar que siguen existiendo más de un servicio de emergencia en poblaciones que no lo justifican y, que pese a que la enorme mayoría de los partos se hacen en el mutualismo hay siempre más de un prestador para atenderlos. El caso de Paso de los Toros, cuando falleció una parturienta porque no había ginecólogo de ASSE, mientras había uno de guardia, a pocas cuadras, en la mutualista que asiste sus partos en el hospital, es apenas una muestra de la falsedad  que se esconde detrás del maquillaje marketinero que le dieron a lo que ya existía y lo convirtieron en el mayor logro de sus políticas sociales.

Esgrimen como conquista la universalidad en la accesibilidad a los servicios asistenciales, ignorando que nunca existió persona alguna que no fuera atendido si lo necesitaba. Prueba irrefutable de ello fue la asistencia a un Senador de la República del FA, el tristemente recordado por mentiroso Nicolini, que se internó en el Pasteur o el desborde de consulta que siempre existe  en el hospital de Maldonado cuando los turistas recurren a él para no pagar los altos costos de los servicios privados.

Lo que no se puede discutir es que terminaron creando un Seguro Nacional de Salud, solución propuesta por el Partido Nacional en 1985, presentada en el Senado de la República, que redactamos con mi hermano de la vida el Dr. Joaquín Lucián y el Dr. Gonzalo Aguirre que le dio forma de ley, a pedido de Wilson Ferreira Aldunate. 

Lo increíble es recordar las causas por las que no prosperó aquella propuesta. Además de que el gobierno entendió que el costo era muy elevado y había que exigirle demasiado a la gente que salía de la gran crisis de los 80, el Frente Amplio se oponía radicalmente porque según ellos se trataba de una propuesta privatizadora, como en la realidad ha sido esta ley que propusieron y aprobaron hace 10 años. Jodida paradoja, terminaron impulsando lo que 30 años antes habían combatido.

Obviamente lo que no aclaran es que pese a la propaganda ha quedado mucha gente fuera de la cobertura del FONASA, porque alcanzaron los 18 años y dejaron de estar cubiertos por el aporte de sus padres, otros porque sus ingresos no alcanzan a una determinada suma mensual y finalmente aquellos que no trabajan que cada vez son más. Ahora prometen hacer ingresar a los jóvenes entre 18 y 23 años, pero no tienen seguridad porque eso va a exigir un refuerzo de rubros que el déficit que dejan va a tornar sumamente difícil de concretar.

Esta columna es sólo el inicio del tratamiento de este tema, porque me he propuesto intentar no llevarme conmigo esta información cuando me llegue el llamado del Señor.